Asunción recibe a miles de hinchas argentinos y brasileños en una jornada que transforma la ciudad en un punto de encuentro continental donde la expectativa, la pasión y el impacto económico marcan el pulso previo a la final de la Copa Sudamericana.
La capital paraguaya vive un movimiento inédito con la llegada masiva de seguidores de Lanús y Atlético Mineiro, quienes coparon calles, plazas, hoteles y locales gastronómicos en la antesala del partido decisivo que se jugará este sábado a las 17:00 h en el Estadio ueno Defensores del Chaco. Es la tercera vez desde 2019 que Paraguay alberga una definición internacional, una condición que posiciona al país como destino recurrente para eventos de alto impacto.
La presencia de los fanáticos generó un repunte económico transversal, desde vendedores ambulantes hasta empresas hoteleras. Las 4.000 habitaciones disponibles en Asunción, equivalentes a unas 8.000 camas, fueron ocupadas en su totalidad, con reservas realizadas con anticipación para los días 21 y 22 de noviembre. El flujo de visitantes también impulsó el trabajo en bares, restaurantes y servicios vinculados al turismo.
El movimiento alcanza a unas 12.000 personas convocadas para atender la demanda durante toda la semana del evento, según cifras oficiales. En ese grupo se incluyen 1.200 trabajadores asignados a más de 300 locales gastronómicos, además de personal destinado a logística, seguridad, transporte y actividades complementarias que requiere una final de esta magnitud.
Lanús llega a la cita con el objetivo de conquistar su segundo título continental, mientras que Atlético Mineiro busca levantar por primera vez la Copa Sudamericana. Ambos planteles movilizaron a miles de seguidores que ingresaron al país por tierra y aire hasta las primeras horas de este viernes.
Con el Defensores del Chaco preparado para recibir a 40.000 personas, Asunción se consolida una vez más como un epicentro deportivo regional, en un ambiente marcado por los colores granate y albinegro que dominan la ciudad en vísperas de la gran final.